Las personas que hacen ejercicio regularmente duermen mejor por la noche y se sienten menos somnolientas durante el día. El ejercicio regular también mejora los síntomas del insomnio y la apnea del sueño y aumenta la cantidad de tiempo que pasa en las etapas profundas y reparadoras del sueño.
- Cuanto más vigorosamente haga ejercicio, más poderosos serán los beneficios del sueño. Pero incluso el ejercicio ligero, como caminar solo 10 minutos al día, mejora la calidad del sueño.
- Puede tomar varios meses de actividad regular antes de experimentar los efectos completos que promueven el sueño. Así que sea paciente y concéntrese en desarrollar un hábito de ejercicio que se mantenga.
Para dormir mejor, programe su ejercicio correctamente
El ejercicio acelera su metabolismo, eleva la temperatura corporal y estimula hormonas como el cortisol. Esto no es un problema si está haciendo ejercicio por la mañana o por la tarde, pero demasiado cerca de la hora de dormir puede interferir con el sueño.
Trate de terminar los entrenamientos moderados a vigorosos al menos tres horas antes de acostarse. Si todavía experimentas dificultades para dormir, mueve tus entrenamientos aún antes. Los ejercicios relajantes y de bajo impacto, como el yoga o los estiramientos suaves por la noche, pueden ayudar a promover el sueño.